En mis manos tuve cautivo, a un ser que no dejaba volar,
y que cuando sus alas preparaba, yo no la podía soltar,
tardes brillantes de negro fulgor, porque eso en mi vida sucedió,
cuando esa hada a otro destino partió, cuando de mí se despidió.
Espacios vacíos en espacios de luz que de ella siempre emanó,
de estrellas que se apagan, que mi mano alcanza deseando encender,
un hada en el cielo pasa surcando su estela de luz, y puedo escuchar
que me dice espero ese día en que te vuelva a ver, un sueño me debes,
a donde voy ahí se fabrican los sueños, y un sueño también te voy a deber.
El_Mago
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