Intento esconder el respirar del sueño
que me descubrió aun despierto,
lo quiero incrustar en la calle oscura
para perderlo de mi vista,
y hacer mis propios sueños como yo quiero
y hacerlos a mi antojo,
no depender de ellos para esperarlos y esperando
que se me realicen,
quedarme mudo sin hablar delante de ellos
con la voz de mi conciencia,
despertar sobresaltado con un suave sabor de miel
manando de aquellos sueños que espere encontrar
y que me dejaron descansar en ríos de agua dulce
con todos aquellos besos que no me dieron
y que me dejaron esperándolos,
mil años son muchas noches y muchos sueños
que se quedaron suspendidos en las cascadas
de las eteriedades del oscuro cielo que guardan sus secretos,
para quedar inmortalizados y puedan cumplirse
en otros tiempos quizás, o mañana tal vez.
que me descubrió aun despierto,
lo quiero incrustar en la calle oscura
para perderlo de mi vista,
y hacer mis propios sueños como yo quiero
y hacerlos a mi antojo,
no depender de ellos para esperarlos y esperando
que se me realicen,
quedarme mudo sin hablar delante de ellos
con la voz de mi conciencia,
despertar sobresaltado con un suave sabor de miel
manando de aquellos sueños que espere encontrar
y que me dejaron descansar en ríos de agua dulce
con todos aquellos besos que no me dieron
y que me dejaron esperándolos,
mil años son muchas noches y muchos sueños
que se quedaron suspendidos en las cascadas
de las eteriedades del oscuro cielo que guardan sus secretos,
para quedar inmortalizados y puedan cumplirse
en otros tiempos quizás, o mañana tal vez.
Martín.
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