En mi ventana se respira el mar si es que yo lo quiero,
se rompen las olas en los marcos haciendo un estruendo lastimero,
asustando a los sueños escapándose en flotantes astilleros,
vibrando los cristales de un corazón adormecido y sincero,
en mi ventana se respira el mar si es que yo lo quiero,
mirar hacia el norte y ver llegar los pensamientos como aguaceros,
mojando todo aquello que debe soltarse y secarse en los recuerdos,
cerrar para siempre un capitulo con fin y que en mis deseos ya no quiero,
abandonarlos en rocas marinas filosas y que ahí vayan muriendo,
en mi ventana se respira el mar si es que yo lo quiero,
y dejar sobre la orilla de sus olas una botella con un mensaje dentro,
"te tuve un día como la oscuridad tiene a la luna y el sol a los cielos,
cumplé a cabo la misión que equivocadamente tu corazón está sosteniendo,
la libertad hizo escala en el mar de mis sueños yo lo estoy sintiendo...
Martín.
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