El cielo es inhóspito, difícil de conocerlo en su totalidad , es la cuna del pensamiento cuando el cuerpo muere y el alma escapa para despertar entre follajes de estrellas que alumbrarán su estadía, el cielo nocturno es como una taza de café que revuelvo con la cuchara hecha de recuerdos y con un puñado de azúcar, simularán los faritos de estrellas que lo envuelven, los dados de los pactos se echan en sus vestigios y las caras dicen que los pactos se cumplen, que por mas que quieran soltarse el candado no los suelta, el cielo es de mil colores, oscuro con ventanitas brillantes cuando la noche lo cubre, azul encendido cuando el sol juega con él, el cielo llora y cuando lo hace refresca las llanuras secas que se convertirán en follajes verdes, es por eso que el cielo es como mi héroe, no me habla pero puedo entenderlo, de cara al cielo puedo saber quien piensa en mi, de cara al cielo puedo elevar una oración y saber con certeza que he sido escuchado, de cara al cielo quisiera morir algún día, para reencontrarme con quienes mas quise y encontrar que Dios nunca se marcho del cielo para ir a dormir a otra parte, que jamas abandono su mirada hacia otro lado, mi cielo nunca estuvo roto, porque al apagarse las estrellas, siempre me alumbraron tus ojos...
Martín...
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