Si acaso te diré adiós con mi mano
porque con el corazón no me puedo despedir,
por lo que me han dicho el verdadero amor
no se olvida y nunca deja de morir,
es como una revelación que te quema el alma
a donde vas permanece siempre en ti,
magias compartidas regresándose las palabras
igual que el corazón no dejan aun de latir
ahora quiero que llueva sobre nosotros
y que la lluvia se llevé todo aquello que nos haga sufrir,
yo nunca quise causarte ningún dolor si lo hubiera sabido
te doy el tiempo que me toca vivír,
si tus lagrimas caen no se porque las estoy sintiendo
en mi piel si estas tan lejos de mi,
y aunque se que jamas te volveré a tener
te necesito hoy y mañana para poder existir...
Martín...
No hay comentarios:
Publicar un comentario