Verdaderos tesoros que ahí permanecen, rodeados de versos, de muchas palabras cual joyas que resplandecen, tomando de ellas lo que nos corresponde, en acontecimientos pasados o presentes, nos llevaremos lo que mencionamos, de ayeres que ya pasaron y de aquí en adelante los presentes para ser recordados...

miércoles, 23 de febrero de 2011



No te conozco del todo porque eres insondeable,
pero tambíen sé quién eres,
cuando parece que no te siento,
es porque estás mas cerca,
como la estrella a los atardeceres,
y también como el matíz que el sol cubre a los cielos,
en los amaneceres,
mis problemas van, mis problemas vienen,
cuando a lo lejos los diviso,
me hago el sordo oyendo, y me hago el ciego viendo,
tu tapas el sol con un dedo,
y cuando me agita lo que ya estoy presintiendo,
cambias aquello que me esta doliendo,
y que estoy sintiendo,
pintando los caminos por donde mi vida transita,
esos signos para que yo los siga,
y a mi espíritu invitas y en el oído le musitas,
que solo nunca me dejas,
que existirá siempre la pradera secreta,
en donde todo existe y nada se inventa,
y en donde el alma escapándose a esos recintos intenta,
refrescarse en las fuentesillas que están brotando,
melodías que el ruiseñor en ese lugar esta cantando,
y canta que Dios es majestuoso,
sencillo como la hoja que el viento esta arrastrando,
y tan poderoso, como el mundo,
que con sus manos esta cargando...



Martín.


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