Llegas puntual como siempre, a la hora en que las sombras pugnan

por esconderse en mis atardeceres y tu ataviada con tu vestido rosa,

y tus labios pintados con las horas que no nos hemos visto.

deshojas ante mi una flor de silencios y de distanciamientos,

gemidos del alma que se mezclan con la quietud de la noche,

gritos del corazòn que alegrandose esta por verte,

pero las horas pasan y la rosa no llega,

tan solo en el agua que encharcada por la lluvia,

veo una rosa que brillando me dice,

que aunque llegar no puede en la vida me sueña,

y en el sueño me anhela.

Abre este regalo, no es un regalo cualquiera, al abrirlo

encontraras sentimientos y el amor que para ti quisiera,

no es amor que el tiempo olvida y si tanto yo insistiera,

te dirìa que el amor no existiera, sì en la vida no te conociera.

Existe un àngel de singular belleza, de innigualable destello,

al observar su tennue encanto no encuentro nada mas bello,

porque a su lado en ese lugar de brilloso encantamiento,

sumergirme en sus aguas yo puedo, y alejarme ya no puedo...


Martín